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viernes, 18 de abril de 2008

Los desobedientes

Mi esposo y yo, cuando éramos chicos, (siete y ocho años), nos habíamos encontrado para jugar, a la hora de la siesta. La mamá de él tenía que salir por un momento, y nos dijo que nos quedáramos adentro, que no fuéramos al fondo, porque había maderas con clavos y estábamos descalzos y que por ningún motivo comiéramos guindas porque estaban calientes y nos iba a doler la panza.

¿Se imaginan qué hicimos? Nos fuimos al fondo, él se subió a la planta de guindas y yo desde abajo las atajaba con mi pollera, pero tuve tanta mala suerte que pisé una madera y me clavé un clavo en el pie. Él se bajó de la planta y me sacó el clavo. En el pie me quedó un agujero perfecto. "No le digas nada a tu mamá", me dijo, y eso hice, no dije nada.
A la noche mi pie comenzó a hincharse y una línea roja corría por mi pierna y no tuve otro remedio que despertar a mi mamá para que me lleve al médico.
Me pusieron la antitetánica y de vuelta a casa. Al otro día, qué lío!!!, mi madre me quería matar!!! y la madre de él quería cortarlo en pedacitos!!!. Nos habían amenazado con no dejarnos ser más amigos. Por unos días hicimos todo lo que nos pidieron nuestras madres, sin protestar, hasta que se olvidaron del asunto y empezamos de nuevo a las andadas... Ya les contaré otro día!

10 comentarios:

Patricia Lopez Lalli dijo...

Pero mirá vos qué lieros que eran! Pero aunque los querían matar, no se dieron por vencidos, y hoy son una pareja de tortolitos ejemplar!
Bueno, me alegro mucho de que así sea, chicos! Sigan haciendo travesuras, que para eso no hay edad!
Los quiero mucho ;)

Elsis dijo...

Patito querida, nunca nos dimos por vencidos porque éramos tan felices haciendo de las nuestras...
Siempre teníamos "trabajo" que hacer, mejor dicho siempre estábamos dando trabajo a nuestras madres.
Vos sabés que ese gordito sigue siendo tan tierno como entonces, cualquier cosa que se me ocurre él se anota, creo que lo llevo por mal camino.
Besitos!

Nosotros también te queremos!

Natacha dijo...

El muchacho te pinchó en el pié y en el corazón, mami.
Qué bonito debe ser teneros el uno al otro.
Hermosa y sencilla historia, como todas las que nos regalas.
Un beso mami del alma
Te quiere
Natacha.

Elsis dijo...

Hola natacha, así es y recordar esas travesuras nos hace mucho bien.
Imaginate cuanto nos conocemos, sus padres y los míos fueron muy amigos de toda la vida.
Es muy bonito tenernos el uno al otro.

Besitos, mi niña ojos de agua!!!!!

Aguabella dijo...

ELSIS
Que precioso relato, ese chiquito sacando el clavo..valiente y amoroso, espero más travesuras.
besitos

Ana Garcia dijo...

Elsis corazón, tienes aqui una cosita para ti:
http://parapequesynotanpeques.blogspot.com/2008/04/premio-amigas-blogueras.html

Un besazo

Elsis dijo...

Aguabella, no te imaginás cuantas travesuras más tengo psara contar.

Gracias por tu visita, querida amiga!

Besitos!!!

Elsis dijo...

Gracias Fair Lady por ser tan amorosa y otorgarme este premio tan lindo!


Besitos!!!

Abuela Ciber dijo...

Que ternura leerte, realmente es grato estar por aca.
Recibe mis cariños.

Elsis dijo...

Gracias querida abuela por ser tan amorosa, me alegra verte por aquí.
Te estaba extrañando!

Muchos besos para vos!!!

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